11 de mayo de 2007

Los 10 mandamientos del bloguero

1.- Seduce con el diseño. Que el aspecto de tu blog dé ganas de leer, especialmente de leerte a ti. Huye de los colores chillones y las composiciones raras. Evita los fondos negros y blancos puros, y los textos compactos y uniformes.

2.- Deja el código tranquilo. Los seis millones de pijaditas que hay por ahí para ponerle a tu blog (el contador de visitas visible, el animalito de los cojones, el relojito, los calculadores chorras, los muñequitos varios, la fase lunar, etc.) acaban siendo un coñazo y harán que tu blog parezca la carpeta que llevabas al cole cuando tenías 12 años.

3.- Escribe sencillo. Que tu estilo sea inmediato, accesible. No te concentres en tus calidades literarias, si las tienes. Si eres buen escritor y quieres demostrarlo, escribe una novela. El blog no debe ser para entrenar tus metáforas ni para jugar a la prosa atmosférica. El lector echará un vistazo a tu blog después y antes de otros cuatro, así que cualquier fango estilístico será más molesto que otra cosa.

4.- Pero escribe bien. Cuida tu redacción y especialmente tu ortografía. Pon en evidencia lo mal que escriben los periodistas siendo escrupuloso con tu uso de la gramática y del idioma, cuidando detalles como las mayúsculas y los signos de puntuación, y haciendo lo que ellos han dejado de hacer: escribir con atención. Y usando el diccionario.

5.- No te pongas muy personal. No sé quién eres, y no me importan tus problemas. Puede que ni conociéndote me interesasen, así que hazte una idea. Escribe sobre cosas que vaya a encontrar un poco interesantes, por favor. Me da igual tu vida sentimental, lo adorable que sea tu gatito, o que creas que estás buena. Y tampoco me cuentes tus miserias laborales; las únicas que me pueden interesar son las de profesiones un poco interesantes, como el audiovisual, la medicina o la prostitución.

6.- Especialízate. Los blogs sin tema no triunfan. Hay más futuro en un blog sobre caperuzas de bolígrafo que en uno sobre los pensamientos generales y/o aleatorios de su propietario.

7.- Absorbe de la Red. El blog es el epítome de lo que representa internet, por lo que has de ser una esponja, un navegante empedernido. Conoce las webs, los blogs y los podcasts; infórmate por internet, conoce hasta el último tubo de la semana, llena tu carpeta de favoritos, y convierte tu blog en un pequeño nodo dentro del ciberespacio. Así estarás al día y siempre tendrás un tema sobre el que postear si se va la inspiración o estás demasiado ocupado.

8.- Comenta en otros blogs. Te permitirá relacionarte con blogueros interesantes y los comentarios en sus webs atraerán visitas a la tuya. Quién sabe, puede que hagas algún amigo.

9.- Controla tus temas, sin profundizar demasiado y con decisión. Que se note que sabes de qué estás hablando: el que también sepa lo apreciará y te seguirá visitando por complicidad, y el que no se irá pensando que sabes un montón, sea verdad o no. La gente está deseando acceder a la información de un infiltrado, especialmente de la(s) industria(s) del entretenimiento: cualquier chorrada te hará parecer un Garganta Profunda que lleva una vida interesantísima.

10.- Haz reír. Pon en marcha tu vis cómica: hará que tu blog parezca mucho más interesante de lo que es en realidad. El Make’em Laugh es en realidad el Con un Poco de Azúcar. Ten en cuenta que casi todo el mundo te leerá en el trabajo, y eso ya es triste de por sí. Además, el humor debería ayudarte a no tomarte muy en serio, y recordar que tu blog no te pertenece (es de Blogger, o de la Coctelera, o de quien sea), que tu blog no eres tú, ni es tu carrera, ni tu vida, ni es nada, y que tu blog no es más que un blog.

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Te regalo este comentario porque veo que no tenés ninguno. Ya conocía tu blog antes de mencionarme, y me en encantó tu decálogo. Aunque a casa de herrero...

Si sos mujer, te mando un chupón de lengua, si sos hombre, respetuosos saludos.

Anónimo dijo...

Están buenos los mandamientos, habrá que seguirlos para ser muuuy exitosos en nuestros blogs. Jaja.

Saludos

Anónimo dijo...

Buen compendio de normas, pero ten en cuenta, como tu dices, que puede que te lean todos los colectivos. Así que poner en tela de juicio las capacidades sintácticas y ortográficas de los periodistas, no creo que sea la mejor forma de aconsejar como escribir en un blog. Y que conste no presupongo intencionalidad en el momento en que lo hayas escrito. Te lo dice uno de ese gremio que comete faltas. No todos somos tan inútiles. Lo malo es que los que lo son tienen suerte de representar a todos.

Enhorabuena por el blog

TioVania dijo...

anónimo, harías bien en presuponer la intencionalidad, lo he dicho con toda la mala idea. Sé que hay unos cuantos periodistas que se pasan por aquí de vez en cuando; y si tú eres del gremio y escribes bien sabrás a qué me refiero. Está claro que no todos los periodistas escriben mal (y con errores, que es mucho peor), pero el nivel últimamente da miedo.

Gracias Jesús y Artemisa, seguid comentando.

El Hermano Montgolfier dijo...

Esto está muy bien para los que buscan protagonismo, pero para los que les importa tres pitos si les leen o si no, pues es otra serie de normas más, y de normas ya estamos hartos.

Anónimo dijo...

Gracias por lo consejos, utiles, pero me veo incapaz de seguir algunos. Un saludo.

Anónimo dijo...

Hay muchas cosas que son objetivas, como lo de escribir sin parafernalias. Cada uno escribe como puede o como sabe, no creo que sea un defecto intentar añadir toques literarios a las narraciones (que no quiere decir que yo lo haga). La cosa es saber hacerlo con gracia.

Anónimo dijo...

A colación con el mandamiento 9... ¿os he contado cuando me tuve que enfrentar en una metarealidad a un psicokiller fanático de Estrellita Castro? ¿No? Pues así fue... Pero no profundizo :D

Anónimo dijo...

Te robo el articulo para ponerlo en mi blog. Estupendo...